A lo largo de las últimas semanas hemos estado platicando de las escuelas de tiempo completo. Porque la SEP definió que el programa de La Escuela es Nuestra, se quedaba sin el apartado de escuelas de tiempo completo y se iba toda la lana a temas de infraestructura. En su momento esto dijo Delfina, titular de la SEP.
16 días después
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Así fue como ayer en una tarjeta informativa la SEP aclaró que siempre sí, seguirán los recursos pero que se los van a dar directo a padres, madres de familia y niños. “Toma niño, págale a tu maestro para que te cuide 4 horas más, y prepárate una comida saludable, variada y nutritiva”. A esos niños no habría que darles dinero, sino credencial de elector. Vamos por partes, el programa de escuelas de tiempo completo funciona principalmente en las zonas con más marginación del país, para muchos niños, la comida que reciben en la escuela es la única comida que reciben en todo el día. El que puedan ir a estas escuelas les garantiza educación, al menos un alimento al día, y que estarán cuidados mientras sus padres o madres trabajan. ¿De qué les va a servir el dinero? Pero hay otro tema que me genera dudas, cómo es eso de que, para evitar intermediarios, si los recursos son el sueldo de los maestros… esos los paga la escuela, y la comida. Los legisladores de Morena en su momento se pronunciaron a favor de que el programa permanezca, padres y madres se han organizado para hacer oír su voz, ojalá.
Me sorprende que, habiendo sido maestra, la Secretaria de Educación Pública, de conocer las necesidades sí de las escuelas pero más de los menores, no tenga algo distinto que opinar sobre este tema. Miren, no es un asunto de posturas políticas, es un asunto de familias, y lo poco, poquito que puede garantizarles el estado, a quienes menos tienen. Si estos chivatos y chavetas no tienen de sus escuelas para agarrarse ¿Qué les queda?